Si tenemos que justificar la popularidad que ha alcanzado las letras de madera, una de las razones con más peso es, sin duda, el auge del mundo 'Do It Yourself'. Cada vez son más las personas que se animan a adentrarse en el mundo de las manualidades, en busca de detalles únicos y personales para decorar sus hogares. Así, las letras de madera se han convertido en el lienzo en blanco en el que muchas personas reflejan todo su estilo.
Con pintura, con abalorios, con pedrería... Son muchas las opciones que encontramos en nuestra búsqueda de ideas para decorar letras. Así, hoy en día podemos considerar estas cuatro técnicas como las más populares:
1. El decoupage: se trata de decorar con papeles estampados, principalmente servilletas. Para ello, extraeremos la capa impresa de la servilleta, que es la que necesitaremos, y aplicaremos sobre la letra y la servilleta un adhesivo en spray. A continuación, iremos cubriendo toda la superficie de la letra con el papel, con mucho cuidado y ayudándonos de una pequeña espátula, para terminar recortando los bordes que sobran.
Así queda el decoupage, acompañado de otros elementos decorativos:
2. El craquelado: se trata de una técnica empleada para conseguir un efecto rústico y envejecido, ya que consiste en imitar las grietas que, con el paso, van apareciendo en la pintura. Para hacerlo se necesitan dos pinturas de diferentes tonalidades y un producto craquelador. De este modo, comenzaremos aplicando una primera capa sobre la letra y, cuando haya secado, aplicaremos el producto craquelador. Por último, aplicaremos encima el segundo tono, y observaremos cómo, al entrar en contacto con el craquelador, empezarán a aparecer las grietas, dejando ver el color de la primera pintura.
Este es el efecto del craquelado:
3. El estarcido: es una técnica muy sencilla, pues consiste simplemente en la decoración con plantillas. Para ello tan solo tendremos que aplicar una primera mano de pintura en spray con el color deseado y, cuando haya secado, colocar la plantilla y pintar con cuidado con brocha o esponja.
4. El transfer: es quizás la técnica más compleja de las cuatro, no por la dificultad de los pasos, sino porque se requiere de cierta delicadeza para conseguir un buen resultado. Se trata de transferir una imagen impresa a una superficie. Para ello, tendremos que imprimir la imagen, pero invertida, con una impresora láser. A continuación, aplicaremos gel medium, que es el producto que facilitará la transferencia, sobre la superficie de la letra (que previamente habremos pintado con el color base deseado), y colocaremos la imagen encima, evitando la formación de bolsas. Cuando haya secado, iremos humedeciendo y, con ayuda de los dedos o una esponja, retiraremos el papel.
En estos carteles vemos cómo quedaría el efecto del transfer:
Sin embargo, además de las técnicas 'tradicionales', con nuestros productos en spray podemos conseguir también crear e imitar efectos, combinando diferentes tonalidades. Esto mismo es lo que nos enseña Mariluz, del blog Brico&Deco, quien nos muestra en estos dos tutoriales cómo conseguir dos acabados: el óxido y el marmolado.
Imitando efecto óxido
El auge del estilo industrial y la estética de los loft neoyorquinos ha puesto al acabado óxidado en un primer lugar. Así, para imitarlo necesitaremos:
- Pintura en spray forja Pintyplus en los colores azul, verde y rojo.
- Un poco de sal.
- Una esponja o bolsa de plástico.
Paso a paso:
1. Comenzamos aplicando una capa de color azul.
2. A continuación, esparciremos un poco de sal por la superficie de la letra.
3. Pasamos 60 minutos, aplicaremos el color verde de forma desigual, incidiendo en algunas partes. Además, nos ayudaremos de una esponja o bolsa para conseguir el efecto.
4. Por último, terminamos aplicando tonos de rojo, para dar con el acabado perfecto.
Dadle al play y mirad el paso a paso en vídeo:
Imitando efecto mármol
Para un estilo completamente opuesto, más formal y romántico, encontramos el acabado marmoleado, muy popular en la actualidad. Así, una vez más vamos a recurrir a los productos en spray, para conseguir un trabajo rápido, sencillo y eficaz. ¡Tomad nota!
- Chalk Paint Spray en los colores blanco roto, negro plomo y color piedra.
- Barniz al agua brillante en spray.
- Una pluma.
- Lija de grano muy fino (400 o superior).
- Una esponja o bolsa de plástico.
Paso a paso:
1. Empezamos aplicando una capa de blanco roto.
2. Cuando haya secado, con ayuda de una pluma aplicaremos el color negro plomo, creando el efecto de las ondas que caracteriza al mármol.
3. Después, pasaremos levemente la lija y con ayuda de una esponja o bolsa de plástico aplicaremos a toques el color piedra.
4. Volvemos a lijar levemente, para terminar aplicando una mano de barniz.
Aquí tenéis el vídeo:
¿Qué os ha parecido? ¿Con cuál de los dos efectos os quedaríais?
Agradecimientos a Brico&Deco