Hoy me toca mostraros uno de los trabajos que más tiempo me llevo y mas trabajo. No encuentro la única foto que tenia del mueble solo para que podáis ver el increíble cambio que le di. Este era el tipo de mueble bar de los ochenta que estaba destinado a ir a la basura. Le faltaban dos cajones pero a mi me iba a venir que ni pintado así que me le dieron.
Al ser de melanina no se podía lijar así que primero le di varias manos de imprimación por todo el mueble digo todo, porque hice también todos los interiores. Cuando realizo un trabajo me gusta que todo este bien, que cuando abra un cajón o una puerta este acorde con el resto del mueble. Os cuento esto porque hace un par de años me mostraron una restauración de una cómoda, a la que la habían dado un cambio de imagen estilo vitange y cuando la señora me mostro el mueble por dentro se le habían dejado tal y como era y la verdad es que no quedaba nada bien. Por lo visto se lo debió de hacer una decoradora muy conocida en Valladolid y no la salió nada barato.
Bueno siguiendo con la cuestión del mueble, después de darle varias manos de imprimación le di otras dos manos de una pintura mas económica en color vainilla , lijando siempre entre cada capa de pintura claro. Decidí hacer esto porque el mueble es muy grande y la pintura que iba a utilizar es algo cara así solo le tenia que dar como mucho dos manos. Esta pintura tiene un acabado empolvado y queda precioso. para darle ese toquecito envejecido le di a todo el mueble una capa de cera con betún de Judea deje secar y frote y frote para sacarle brillo. Le cambie los tiradores y listo mi nuevo mueble bar. Aun me queda de ponerle las cornisas porque en mi caso le he dividido en dos partes.
Que sepáis que tengo guardada de recuerdo una de las puerta que no puse para así poder mostrar el cambio tan espectacular que le di.
Perdonar por las fotos porque no son de mucha calidad.
¿ Que os parece el cambio?