Puedes sustituir la parte de agua de estas recetas por agua de rosas comprada en tiendas especializadas o con aguas florales preparadas en casa. Si prefieres el lujo de las esencias, mezcla y combina aceites florales para crear tu propio aroma personal.
Jabón de lavanda rosa y lima
El delicado color rosa pálido de este jabón se debe, en realidad, a un pigmento azul. Si quieres un color azul lavanda, prepara esta receta suprimiendo los aceites de esencias y el pigmento. Guarda el jabón durante al menos dos semanas, luego rállalo todo y vuélvelo a preparar. Este jabón, duro y con burbujas grandes, posee buenas cualidades antisépticas y es excelente para las pieles grasas.
La palabra lavanda procede del latín lavo (yo me lavo). Dos cucharaditas de agua destilada de flores de lavanda sirven para recuperarse de la afonía y también alivian los temblores y pasiones del corazón. También es una cura excelente para las quemaduras solares y es un práctico ahuyentador de polillas y otros insectos.
Ingredientes:
- 227 gr. de sebo de vacuno,- 227 gr. de aceite de coco,
- 454 gr. de grasa vegetal,
- 134 gr. de hidróxido de sodio (sosa cáustica o lejía),
- 389 gr. de agua destilada o mineral,
- 2 cucharaditas (10 gr.) de colorante líquido azul para el jabón,
- 2 cucharaditas (10 gr.) de aceite de esencia de lavanda,
- 1 cucharadita (5 gr.) de aceite de esencia de lima,
- 1 cucharadita (5 gr.) de benzoína líquida.
Elaboración:
Engrasa un molde cuadrado u oblongo poco profundo. Pesa las grasas y los aceites de base y ponlos a fuego lento en un recipiente de esmalte o de acero inoxidable. Mientras se mezclan las grasas, pesa el agua y viértela en un cuenco o jarro de vidrio o plástico resistente.
Llevando unos guantes de goma y protección para los ojos, añade al agua el hidróxido de sodio (lejía) y remueve hasta que se disuelva. Cuando los aceites y grasas se hayan derretido, retíralos del fuego. Pon un termómetro para líquidos en los aceites y otro en la solución cáustica. Cuando ambos termómetros alcancen una temperatura igual, entre 49 y 60 ºC, vierte la solución cáustica en el aceite.
Remueve intermitentemente y logra que la mezcla espese hasta el punto en que pueda hacer gotear un poco de jabón desde el reverso de una cuchara. Deja dibujada una línea sobre la superficie de la mezcla. Esto te llevará unos 40 minutos.
Añade el colorante y los aceites de esencias y remueve bien. Viértelo inmediatamente en el molde y tápalo con una toalla o manta. Déjalo asentar durante 24 horas o hasta que el jabón adquiera una consistencia sólida. Con unos guantes de goma, saca el jabón del molde. Si has utilizado un molde en forma de losa, corta el jabón en pastillas en ese momento. Cubre el jabón y déjalo secar cuatro semanas antes de usarlo.
Rosas impregnadas con un toque de especias
El precio de un aceite puro de esencia de rosas puede ponerte furioso, pero afortunadamente puedes comprar aceites artificiales de fragancia de rosas más asequibles que son un buen sucedáneo para el propósito de fabricar jabón. Combinado con aceite de girasol, manteca de cacao y una pizca de cardamomo, un baño caliente al final de un largo y esforzado día puede resultar una experiencia verdaderamente exótica.
Este tipo de jabón alivia el estrés y la tensión. Es duro, pero cremoso y con grandes burbujas. Los aceites de rosas se utilizaban para dar brillo a los párpados y, en los tiempos anteriores al cuidado dental, se mascaban pastillas hechas con pétalos de mirto y rosas machacados con miel para dar buen aliento. Uno de los perfumes más famosos hechos con la rosa fue el Red Rouse (rosa roja), fabricado por Floris de Londres en tiempos de rey Eduardo VII.
Ingredientes:
- 283 gr. de aceite de coco,- 283 gr. de grasa vegetal,
- 227 gr. de aceite de girasol,
- 113 gr. de manteca de cacao,
- 134 gr. de hidróxido de sodio (sosa cáustica o lejía),
- 389 gr. de agua destilada o mineral.
- 2 cucharaditas (10 gr.) de colorante rojo líquido de jabón,
- 2 cucharaditas (10 gr.) de aceite de fragancia de rosa inglesa,
- 1 cucharadita (5 gr.) de aceite de esencia de cardamomo,
- 1/2 cucharadita (2,5 gr.) de benzoína líquida.
Elaboración:
Haz este jabón de la misma manera que el anterior de lavanda y lima rosa. A diferencia de aquél, éste alcanzará el punto de cuajado en unos 15 minutos.
Jabón de girasol y caléndula
El aceite de girasol tiene valiosas vitaminas y minerales. Con las propiedades curativas de la caléndula, tendrás un jabón para todas las estaciones que, además, será un regalo encantador. Es adecuado para todo tipo de pieles y la pastilla es semidura con espuma densa y textura cremosa.
La maravilla o caléndula se puede emplear como talismán, pero para ser verdaderamente afortunado hay que cogerla cuando el sol entra en el signo de virgo y envolverla junto con un diente de lobo en una hoja de laurel. Si sueñas con la caléndula en plena flor, no hay duda de que tendrás riquezas. Para los menos místicos, prueba a frotar una picadura de abeja o avispa con la cabeza de la flor; la tradición cuenta que proporciona un alivio instantáneo.
Ingredientes:
- 340 gr. de aceite de coco,- 340 gr. de aceite de girasol,
- 227 gr. de aceite de palma,
- 149 gr. de hidróxido de sodio (lejía),
- 404 gr. de agua destilada o mineral,
- 1 cucharadita (5 gr.) de cúrcuma,
- 3 cucharadas soperas (45 gr.) de pétalos secos de caléndula,
- 2 cucharaditas (10 gr.) de aceite de salvia clara,
- 2 cucharaditas (10 gr.) de aceite de mejorana.
Elaboración:
Engrasa el molde con grasa vegetal. Haz el jabón de la misma forma que el de lavanda y lima rosa descrito anteriormente, pero, cuando empiece a tomar la temperatura de las dos mezclas, espera hasta que ambos termómetros alcancen la misma temperatura entre 54 y 65 ºC. Vierte la solución cáustica en las grasas y remueve. Hazlo de manera intermitente hasta que la mezcla se cuaje. En principio, suele tardar unos 40 minutos.
Añade la cúrcuma y los aceites de esencias y remueve bien. Luego añade los pétalos de flores secas y remueve con energía. Viértelo todo enseguida en el molde y cúbrelo con una toalla o manta. Déjalo asentar 12 horas o hasta que el jabón adquiera una consistencia casi sólida.
Con unos guantes de goma, saca el jabón del molde. Si has usado un molde en forma de losa, corta el jabón en pastillas en este momento. Cubre el jabón y ponlo a secar durante cinco semanas antes de usarlo.