Materiales de manualidades y abalorios para realizar esta técnica:
Máquina de laminar o rodillo Fimo, Fimo en color marrón, cuchilla Fimo, papel de aluminio (de cocina), buriles de bola pequeña, sellos de estampar, una pajita (fina o gruesa dependiendo del grosor que deseemos en nuestra creación), rodillo caucho, cortadores de Fimo en forma corazón, oval, redonda (se puede prescindir de ellos pero nos vendrán muy bien dependiendo la forma que elijamos) y betún mezclado con cera.
Proceso:
Comenzamos acondicionando el Fimo y lo pasamos por la laminadora o rodillo para conseguir una plancha de unos 5 mm. de grosor.
A continuación, arrugamos el papel de aluminio haciendo una bola, lo abrimos y lo extendemos sobre la plancha de Fimo que tenemos en la mesa y con ayuda del rodillo de caucho lo vamos marcando sobre el fimo para que le deje las arrugas características de la piel. Otra opción es utilizar la nueva lámina de marcar Fimo efecto piel la cual es perfecta para esta técnica VER.
Ahora, cortamos la plancha con los distintos cortadores que tenemos por ejemplo en forma corazón, oval…, o personalizamos el corte con la cuchilla.
Lo siguiente es marcar con los estampadores, utiliza los modelos que más te gusten con flores, letras, etc y marca el Fimo con ellos como puedes ver en la foto.
A continuación, con la pajita hacemos el agujero para poder utilizar nuestra creación como colgante y con un espagetti de Fimo rodeamos el agujero y aplastamos un poquito para darle más realismo. También marcamos esto último con el papel de aluminio arrugado.
Para finalizar, con la ayuda del buril, podemos hacer le los bordes o imitar costuras. También quedan más autéticos si con la cuchilla Fimo le hacemos unas pequeñas muescas en los bordes.
Por último, horneamos nuestras piezas siguiendo las instrucciones del fabricante y una vez enfriados aplicamos betún mezclado con cera sobrea cada pieza de fimo hornada y limpiamos con un trapo consiguiendo remarcar y envejecer todas las piezas. Si deseamos más brillo (lo cual es muy aconsejable), pulimos las piezas frotando con el revés de una tela vaquera.