Hace unos días os mostraba cómo hacer punto de arroz a ganchillo así como un par de muestras de algo en lo que estaba trabajando con él. Pues bien, aquí el primer resultado: un abrigador cuello para mi hijo pequeño. Que el invierno nos ha llegado tarde pero con ganas este año...
Es un punto muy sencillo, muy agradecido. Se trabaja rápido y el resultado es bonito. Me gusta mucho para este tipo de labores. Bufandas, cuellos, mantas, quedan esponjosos y suaves.
Lo que ya no fue tan fácil fue conseguir que el pequeñajo saliera en la foto sin hacer muecas... Ains! Qué se le va a hacer!
En cuanto termine un par de detalles que le faltan os muestro la otra labor, con este mismo punto, para que veáis otras aplicaciones.