El material que vamos a utilizar es el siguiente: anillas de refresco, y cinta del color que mas os guste.
Lo primero que hay que hacer es ir recogiendo las anillas de los refrescos que vayamos tomando, esto es tarea fácil.
Lo siguiente es ir cortado las lengüetas para que podamos pasar la cinta sin problema por los orificios.
Empezaremos cortando unos 70 cm de cinta y colocaremos la primer anilla en el centro de la cinta y dejaremos una pequeña baga.
El siguiente paso sera colocar la segunda anilla.
Colocaremos la segundo anilla encima de la primera y pasaremos la cinta de arriba hacia abajo por el seno que hemos formado (podéis verlo en la imagen). Pasaremos los dos extremos.
Ahora vamos a colocar la tercera anilla.
Esta anilla la colocaremos debajo de la segunda y pasaremos la cinta desde abajo hacia arriba por el seno. Pasaremos los dos extremos.
Iremos repitiendo esta operación hasta alcanzar la medida deseada.
Cuando hayamos colocado la última anilla pasaremos los dos extremos de la cinta dejándolos en la parte superior de la anilla.
Una vez tengamos los dos extremos en la parte superior uniremos la cinta con dos nudos simples.
Para cerrar la pulsera solo tendremos que pasar uno de los extremos de la cinta y pasarla por la baga que hemos dejado al empezar la pulsera.
Ya tenemos la pulsera lista para lucirla y dejar a nuestro amigos con la boca abierta.
Y si queréis darle un toque aún mas original, podéis forrar las anillas. Tutorial para hacerlo aquí.
Reciclando salvamos la tierra y dejamos un mundo mejor a nuestros hijos.
Maria Mercè