Los Mikado son un tipo de ambientador concentrado cuyo aroma se va difundiendo gracias a la evaporación del líquido a través de unos palillos de madera. Para que la evaporación se produzca lentamente es esencial que el recipiente utilizado tenga una boca estrecha.
La ventaja de los ambientadores hechos en casa es que se pueden utilizar productos naturales a base de aceites esenciales que además del aroma aportan otros beneficios. Para realizarlos podemos reutilizar recipientes de ambientadores antiguos o cualquier recipiente tipo botella con boquilla estrecha.
Yo en este caso he utilizado aceite esencial de eucalipto, por sus propiedades refrescantes, descongestionantes y desodorantes. Y he añadido un par de gotas de colorante para jabones color rosa.
Las cantidades indicadas en los ingredientes son las apropiadas para obtener 100 ml. de ambientador.
Ingredientes:
40 ml. agua desmineralizada o destilada
60 ml. de alcohol cosmético de 96º
1 ml. aceite esencial de eucalipto (unas 30 gotas)
Colorante para jabones (opcional)
Frasco para mikado
Palitos de madera (brocheta o similar)
Elaboración:
Mezclar el agua junto con el alcohol y el aceite esencial. Agregar unas gotas de colorante para jabones si se quiere. Poner la mezcla en el frasco de vidrio e introducir unos palitos de madera cortados a la medida deseada, de forma que ajusten a la boca del frasco.