Con un poco de imaginación y una tarde de domingo podemos hacer adornos para decorar la casa muy resultones y por un precio de risa. Hace unos días hice este conjunto de corazones para colgar de unos pomos a juego con alguna otra pieza. ¿Os suena la tela? La habéis visto en el cojín que hice aquí. Como me quedaban unos retales pequeños, quise aprovecharla al máximo y así hacer unos adornos a juego con el cojín. No tiréis nunca un trozo de tela, siempre se le puede sacar provecho ;-)
Para que veáis facilmente como hacerlos, os he preparado un breve vídeo para que no pedáis detalle. Yo los he cosido a máquina, pero se puede hacer perfectamente a mano.
NECESITARÁS...
PASO A PASO...
En el vídeo que hay al final del post es como mejor lo veréis ya que es mucho más visual, pero os dejo aquí un poco la explicación escrita por si lo queréis leer.
1. Recortar cuatro retales iguales en forma de corazón.
2. Colocamos 2 corazones uno encima del otro con la cara "bonita" hacia adentro. Entre las dos telas colocaremos la puntilla en horizontal de forma que sobresalga un trozo a cada lado y. Nos tiene que quedar como un sandwich, la puntilla en medio de los dos retales. Fijamos los laterales con alfileres dejando el eje vertical libre de forma que nos pase el dedo por en medio.
3. Doblamos una de las cintas por la mitad y la pasamos por dentro del corazón en vertical, los extremos tienen que salir por abajo y la parte doblada de la cinta tiene que asomar un poco por arriba. Tiene que cruzar el corazón de arriba a abajo. Lo que estamos haciendo es montar el adorno al revés para coserlo y después darle la vuelta.
4. Cosemos el borde del corazón, dejando dos o tres dedos sin coser en un lateral de abajo para meter por allí el relleno. En esta parte luego será fácil coserlo a mano.
5. Damos la vuelta al corazón por el agujero que hemos dejado libre.
6. Rellenamos con guata o con algodón como he hecho yo. Insistimos bien en las curvas superiores del corazón para que se marque bien la forma y quede más bonito.
7. Una vez relleno, cogemos hilo y aguja y cosemos a mano dando pequeñas puntadas (lo menos visibles que sea posible) para terminar de cerrar el trozo que faltaba. Al coser, iremos metiendo el doble hacía adentro para que quede mejor.
8. ¡Ahora sólo falta atar el lazo y colgarlo donde más te guste!