¿Como vais llevando el verano? yo haciendo alguna que otra cosilla y aprovechando el tiempo de vacaciones para crear mas cosas y porque no, vaguear delante de la tele viendo netflix que eso son también vacaciones, al fin y al cabo tiempo libre para hacer lo que nos plazca :-)
Hoy traigo una manualidad no demasiado complicada pero si para estar entretenida dándole vueltas al hilo y trenzando poco a poco. Es un cestillo hecho con hilo de cáñamo, al ser finito pues cuesta mas que si lo hacéis con cuerda mas gruesa, pero así queda muy original y muy bonito para mi gusto.
Os voy poniendo las fotos del paso a paso para que veáis como se hace ;-)
MATERIALES
-Hilo de cáñamo
-Tijeras
-Transportador de ángulos
-Cartón
-Compás
-Lápiz
-Tela
-Fieltro para adornar
-Cola de manualidades y agua
-Brocha
-Aguja e hilo para coser
Lo primero es con la ayuda de un compás, trazar un círculo, con la ayuda de un transportador de ángulos dividirlo en 21 partes, podéis dividirlo en menos partes pero siempre tiene que ser un numero impar.
Ahora se hace un pequeño corte para luego poder enganchar los 10 trozos de cuerda a los que les haremos un nudo en cada extremo para que no se escapen.
Enganchar un extremo en la muesca que queda, le habremos hecho un nudo en el extremo como las otras cuerdas y el otro extremo se va enrollando como muestro en la foto, pasando la cuerda primero por encima y luego pasándolo por debajo y así constantemente e ir tensando.
En esta foto os lo muestro con menos cuerdas para que se entienda el proceso.
Ir pasando por arriba y abajo alternando y tensando.
Cuando lleguemos al tamaño adecuado que queremos para la base del cesto, se desengancha con cuidado y a continuación se dibuja otro círculo con la ayuda del compás.
El diámetro de ese círculo debe ser mas grande que el soporte que vayamos a utilizar, yo usé por ejemplo un táper redondo.
Se enganchan las cuerdas que habíamos soltado en las nuevas muescas que hemos hecho al nuevo círculo de cartón y se sigue trenzando de manera que se le vaya dando altura.
Una vez llegado a la altura deseada, cortar la cuerda y anudarla para que no se escape.
Hacer unos nudos en las cuerdas al borde del cesto y darles un punto de cola blanca.
Mezclar a partes iguales cola y agua con ayuda de una brocha repartir esa mezcla por todo el cesto. De esta manera se endurecerá, será mas robusto y no perderá la forma.
Coger un trozo de tela al gusto para hacerle un forro.
Cortar una tira que no sea muy larga y que sea una anchura mayor que la altura del cesto, darle la vuelta y coser los extremos.
Recortar un circulo de tela e ir cosiéndolo a la tira de tela, esa será la base del forro.
Darle la vuelta y ya está listo para ponerlo en el cestito.
Si queréis le podéis poner algún adorno mas, yo tenia una puntilla de hilo y se la pegué al fondo, también recorté un corazón de fieltro y se lo pegue con cola.
Ya esta el cesto listo. Podéis llenarlo con lo que queráis, yo la tela que usé es de la que me sobró de unas cortinillas que tengo en la cocina y como va a juego me queda genial en la cocina (^-^)