Hola a todos!!!
Hace unos meses descubrí un blog maravilloso de caligrafía, The Postmans Knock, que me llena de inspiración con cada post que publica. Y viendo las cosas tan bonitas que hace Lindsey, la autora del blog, me animé a hacer yo unas invitaciones de cumpleaños con mis plumillas nuevas. Y aunque todavía tengo que practicar mucho, estoy muy contenta de cómo me quedaron. XD
Antes de ponernos a pintar y escribir como locos, lo primero que nos hace falta es tener los sobres en los que vamos a enviar las invitaciones. Esto es importante porque muchas veces nos ponemos a diseñar, hacemos una composición preciosa y perfectísima pero luego no nos acaba de encajar en ningún sobre. Bien porque el tamaño que nos gusta es de un color horrible, bien porque el color que nos pega perfecto es demasiado pequeño o muy grande y la invitación queda como perdida dentro, etc.
Y al final tenemos dos opciones: o dejarlo como está pero que no nos convence ni una pizca, o volver a empezar y cambiar el diseño para que se ajuste al sobre.
Para evitarnos eso, una vez que tengáis más o menos una idea de las proporciones que os gustarían, id a comprar los sobres y ver cómo os encaja y así ya podemos empezar a diseñar con unas medidas definitivas.
En este caso yo escogí unos sobres sencillos de formato DL, los típicos comerciales, de 220x110mm, y las invitaciones son de 210x105mm hechas en papel de acuarela. Luego sólo las dí un poquito de color muy aguado en rosa desde arriba hacia abajo.
Para hacer los mandalas, podéis buscar alguna imagen por internet que os guste y hacerlo primero a lápiz. Si no se os da muy bien dibujar podéis usar papel de cebolla para pasarlo o calcarlos directamente. Si no tenéis una mesa de luz podéis poneros en la ventana, es un poquito incómodo pero igual de efectivo.
Para entintar los mandalas he usado una plumilla tipo saji, que es un poco más rígida, de punta redondeada y trazo medio, de la marca Tachikawa, porque las líneas eran muy uniformes en todo el dibujo y estas plumillas hacen trazos muy limpios y de grosor constante.
Para el otro modelo, que tiene unas líneas muy finitas entre medias, he usado una plumilla tipo maru, también de Tachikawa, que tiene un trazo muy finito pero un poco variable que viene muy bien para estos detalles pequeños.
Para empezar a escribir, es mejor hacer primero unas guías con lápiz de la altura de cada renglón, para no torcernos. Si no os atrevéis mucho, podéis practicar un poco antes en una libreta o en unos papeles en sucio. Así cogeréis soltura en los trazos y las letras os quedarán más fluidas y podréis darlas un toque personal, con esas características especiales que tenemos cada uno al escribir.
Esto también nos servirá para calcular lo que nos ocupa cada frase y distribuir mejor el espacio, para que nos quede bien centrado.
Si os sentís más seguros también podéis escribirlo todo a lápiz primero y luego repasarlo con la tinta.
Para el texto usé una plumilla de tipo "G", de Tachikawa, que son muy flexibles, y van muy bien para escribir letra copperplate o letra inglesa, aunque también son muy recomendables para el dibujo y se usan mucho en mangas y cómics.
En los sobres sólo he rotulado el nombre y la dirección. Aunque en principio tenía pensado hacer algunos adornos, al final, por falta de tiempo, no pude.
Como veis el proceso es igual. Con lápiz y con una regla marcamos unas líneas de guía y si queremos lo escribimos todo para estar más seguros, que si nos confundimos con el lápiz no tenemos que empezar todo el trabajo de nuevo. XD
Y ya sólo nos queda poner unos sellos y echarlas al buzón!!
Aunque ya no se lleva mucho esto de las cartas tradicionales, si alguna vez tenéis que enviar alguna, espero que os animéis a hacerlo con sobres bonitos y divertidos. A mi me encantaría recibir una carta así!!! A vosotros no?
Gracias por visitarme!!!
Volved pronto!!!