Hace tiempo que pensaba en hacer un cactus pero tenía un serio problema.. no encontraba por ningún sitio las macetitas adecuadas. Quería que fuesen pequeñitas y no quería que fueran de plástico, con estos dos simples requisitos ¡¡no había manera de encontrar nada!!
Pero un buen día aparecieron las macetas perfectas y a 0.75 centímos cada una. Estos son los materiales que he utilizados (además del clásico relleno):
Normalmente uso dos agujas, con la pequeña coso todo y con la grande hago los puntos que van en el anillo mágico, de esta manera quedan un poquito más sueltos y luego me resulta más fácil hacer la primera vuelta... ¡manías!
Empezamos "la casa" por unos buenos cimientos, la tierra tiene que estar bien apretada en el tiesto sino, con el peso del cactus corremos el riesgo de que todo el invento no se mantenga en pie.
El resultado final es este:
Yo estoy muy contenta, por fin tengo una "planta" que mi gato no se va a comer (crucemos los dedos) y que no puedo matar de ninguna manera.
Por supuesto, cuando dejé de buscar tiestos aparecieron ante mí otras opciones que hasta ese momento no habían surgido. En contreto, a estas dos les voy a dar una oportunidad:
Estos son un juego de cuencos muy pequeñitos de plástico de SØSTRENE GRENE (una de mis tiendas preferidas), vienen con su platito correspondiente y yo creo que son para niños pero yo creo que unos cactus de crochet pueden quedar fenomela ahí metiditos.
Estos son bastante más grandes, son dos cubitos de lata de TIGER, creo que también había de color blanco, yo he comprado estos dos y si no me convencen para macetas de cactus les encontraremos otra utilidad ¡seguro!
¡Hasta pronto!
Fuente: este post proviene de La Condesa Patitiesa, donde puedes consultar el contenido original.
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