Estos son los materiales que necesitamos:
La imagen de las fresas (o la que tu gustes) las conseguimos en internet, imprimimos y recortamos de manera que podamos pegar dentro de la sartén...
Pero primero vamos a pintar la sartén en color blanco, lo estoy haciendo con pintura vinílica con base de agua, pero casi todo tipo de pintura nos puede ser útil...
Ya que pintamos, pegamos el dibujo centrando bien...
Aparte, preparamos los cascarones de huevos, en agua, unas gotas de jabón y otras gotas de cloro, dejamos remojar por aproximadamente una hora...
Sacamos el cascarón del agua, quebramos un trocito de la orilla y de ahí tiramos la telita interna que tienen los cascarones...
Esa telita la desechamos, los cascarones los dejamos secar...
Aparte, preparamos la pintura mezclando con poca agua, sumergimos los cascarones y los dejamos una hora para que se impregnen bien...
Sacamos los cascarones de la pintura y los extendemos sobre hule o plástico de forma separada hasta que sequen bien...
Los metemos en una bolsa de plástico y los molemos lo mas que se pueda, ya sea con una piedra o con un palote...
Esta es la consistencia en que deben quedar: bien molidos...
Con un pincel fino, ponemos pegamento o cola blanca sobre la imagen, procurando que no se salga de la línea...
Empezamos a dejar caer el cascarón molido en partes pequeñas...
Sacudimos un poco para quitar el exceso de cascarones...
Para dar mas color, repintamos encima del cascarón...
Ya que esté bien fijo el cascarón sobre el dibujo, aplicamos una capa de barniz transparente a toda la pieza...
Para simular las semillas que llevan incrustadas las fresas usamos semillas de ají o chiles...
Con silicón, pegamos las semillas, y para terminar, enmarcamos la sartén pegando con silicón una cinta o listón lindo alrededor...
Y un lazo doble... y listo! fácil verdad?
Fuente: este post proviene de Cestería y regalos ecológicos Isa, donde puedes consultar el contenido original.
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