Hoy vamos a enseñarte a reciclar botellas de refrescos y a convertirlas, con hilos de lana y un poco de pegamento, en verdaderos floreros decorativos para tu hogar. Y todo ello, con tus propias manos. ¿Te animas a ponerlas en marcha?
Materiales:
Lanas de colores
Botellas
Pegamento
Paso a paso:
Para hacer estos bonitos floreros, tan solo tienes que elegir un color de hilo de lana para cada una de las botellas que quieras decorar. En realidad, por resistencia, peso y por su forma, es mejor optar por botellas de cristal más bien pequeñas, como por ejemplo las de refrescos que siempre acabamos reciclando en los contenedores verdes. Aunque si no tienes de esas, puedes hacerlo con cualquier otra botella de cristal o plástico.
Al quitarle el tapón, debes comenzar pegando el hilo de lana bien arriba, en el borde, para que luego quede todo cubierto. Gira sobre sí mismo hasta que te encuentres con lo que antes era la rosca de la botella completamente tapada. Una vez termines, vamos a adherir más hilo al resto del cuerpo de la botella. Poco a poco, dándole vueltas sobre sí mismo.
En caso de que el hilo se rompa, por cualquier razón, haz un nudo, y continúa dónde estabas. Después, sigue enrollando el hilo sobre la botella, hasta llegar al final del todo. En el fondo de la botella, procura no colocar hilo, ni que éste llegue demasiado abajo. Eso lo hacemos para aprovecharnos de toda la consistencia de ésta. ¿Fácil, verdad?
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Vía: I creative Ideas