¿Qué tal están pasando este verano? Aquí en tierras mañas
Es curioso como en verano, queremos que sea invierno, y viceversa (francamente tengo curiosidad por ver cómo es un invierno en Zaragoza -Winter is coming...-). Estamos siempre pendientes del tiempo...
Y como me hacía falta un reloj en mi mini-cocina, porque yo sin reloj no se vivir, ahí que fui a IKEA y me compré el más barato que ví (mod. Rusch 1,99â?¬). Sí que es verdad que es un poco rancio... pero me pareció la ocasión perfecta para personalizarlo y enseñaros el resultado.
Los que me conozcáis un poquito, sabréis lo super fan que soy de IKEA. Me parece ideal, porque todo es personalizable, a un precio económico, y porque los stands que tienen montados con los productos son, como poco, ideales.
Photo vía
No me podréis negar que el reloj es lo más seco que hayan diseñado los nórdicos, pero por menos de 2 â?¬ no podemos pedir mucho más.
Para personalizarlo he utilizado:
-Pintura en spray
-Cartulina negra (restos)
-Papel de aluminio
-Un trocito de plastilina
-Una troqueladora de mariposa
-Glossy Accents (o un pegamento potente)
En primer lugar, debes desarmar el reloj, que trae un protector de plástico transparente, y quitar la maquinaria. Es muy fácil, tiene unas pestañitas detrás.
Ahora tienes que forrar el interior del reloj con algo que lo proteja de la pintura (yo he usado papel de aluminio) pero tú puedes usar lo que creas conveniente.
Aplica la pintura en spray en algún lugar bien aireado, lejos de fuentes de calor (yo lo hice en la terraza). Tendrás que dejar secar unas 24 horas, o lo que indique el fabricante, pero para asegurar y no dejar marquitas de huellas, yo lo dejé todo un dia.
Una vez seco, es hora de decorarlo. Con la troqueladora corté varias mariposas, y fui pegándolas por el interior del reloj (este paso, obviamente, lo puedes hacer a tu gusto: mariposas, círculos, fotos...).
CONSEJO: Cerciórate de que queda todo bien pegadito, sin relieves, para que las agujas del reloj no se enganchen al girar.
Recoloca las agujas, y pon la tapa protectora. ¡Listo! Es súper fácil, ¿verdad?
Yo para finalizar, pegué en la pared algunas mariposas que me sobraron, haciendo el efecto de que salían volando del reloj (esta vez no planas, sino plegando un poquito las alas para que pareciera que volaban).
Puedes hacer un reloj de tu grupo favorito con recortes de revistas, de fotos de tus amigos, dibujos a mano alzada, pegatinas que te molen... El límite lo pones tú.
Me parece una forma genial de conseguir un reloj totalmente personalizado y por muy poco dinero, y como regalo es ideal.
Ya sabes, aquí te dejo el video para que veas todo el proceso.
¿Qué te ha parecido?
¿De qué te harías tú un reloj?
¿Prefieres el invierno o el verano?
Te espero en los comentarios. Gracias por leerme y hacerme feliz.