Para mi esta caja es muy especial, cuando nuestros hijos son pequeños todos lo que hacemos es fantástico, la frase de "lo ha hecho mi madre" nos llena el corazón, pero llega un día en que sin darnos cuenta, dejan de ser pequeños.
Dicen adiós a sus juguetes, a mi me costó una barbaridad, parecía yo la niña y ella la adulta y más aún cuando tuvo la delicadeza de guardar las cosas que yo le había hecho a lo largo de los años.
Imagino que me aferraba a los juguetes como si así se pudiese parar el tiempo, para nosotros los padres siempre serán nuestros niños.
Pero hace unos días, me preguntó si podía hacerle una caja para guardar , piedras, mapas de sus salidas con su grupo de montaña, regalos de amigo invisible, en fin...sus tesoros.
Dicho y hecho, elegimos servilletas y colores y rápidamente me puse a la faena.
Ayer con la visita de una de sus amigas, escuche de nuevo "lo ha hecho mi madre", creo que en un segundo engorde más que en todas la Navidades!!!!
Mil besos!!