Los que me conoceis sabéis que las bodas no son mi fuerte... Pero esta si caló hondo ... No la olvidaremos por mucho tiempo todos los que allí estuvimos presentes... Después de unos días allá por navidades con un nervioso novio eligiendo anillo y preparando la sorpresa... Cogían un avión rumbo a París, si si parece de cuento... Pero es real ... Allá se fueron y volvieron comprometidos con la Torre Eiffel como testigo.
Pasaron los meses y el día de la boda llegó... Trabajaron duro, prepararon cada detalle,cada mínimo detalle esta hecho,pensado y listo para que todos lo disfrutáramos... Y vaya si lo disfrutamos!!!!!
Ese novio guapísimo,nervioso,aguantando el tipo hasta el momento en el que nos leia una preciosa carta escrita por y para la que ya se habia combertido en su mujer, una novia radiante que hacia su entada del brazo de su padre y rodeada de pajecillos cada uno con su función .
No lo puedo asegurar pero creó que para todos los allí presentes no paso desapercibida para nadie.. La emoción de los familiares y amigos que allí nos reunimos era palpable... A todos unos más otros menos pero a todos se nos fue la lagrimilla ... Y si es verdad nunca he asistido a una ceremonia tan emotiva y bonita.
Gracias Oscar y Natalia por regalarnos ese bonito recuerdo.
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