¿Qué hacer cuando descubres algo así, y al insinuar que tal vez podrías hacerte
con alguno de estos cojines, tus hijos te miran muuuy raro?
Porque ¡claro, ya no tienen edad!
Y dices:"Puede que encima de mi cama haya sitio para la abuela de Caperucita,
la Reina de Corazones o incluso para el lobo".
¡Y entonces tu marido te mira todavía maaás raro!
¡Ay, si es que hay descubrimientos que llegan demasiado tarde!
Y vosotros ¿aún estáis a tiempo?