Se trata de unas láminas de papel y acetato que se pueden pintar y posteriormente con el calor del horno convencional se reducen a más del 50% de su tamaño quedando más gruesas y duras.
Nosotras hemos empezado por hacer colgantes, decisión de mi hija Claudia, pero tienen muchas posibilidades.
¿vemos el proceso?
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Primero hemos recortado distintas formas y hecho agujero para poder colgarlo o engarzarlo luego.
Algunas las hemos cortado con tijeras de forma. Hoy había que probarlo todo pues el objetivo es pasar una tarde estupendamente divertida, y así testábamos por vosotras las mejores opciones.
Luego los hemos pintado con lápiz de grafito, pinturas de colores y rotuladores. Me ha encantado como queda luego el lápiz.
Una vez hechas han ido al horno. Ambas hermanas se partían de la risa viendo como se retuercen para hacerse pequeñas.
Y finalmente hemos metido cintas para hacer pulseras y colgantes.
¡ No había manera de arrancar dirección baños!
Aquí os dejo link de algunos sitios donde podéis encontrarlo.
¡ Felices momentos!
Tagged: Plástico mágico
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