Como a Pere y a mí nos encanta la música decidimos dedicar un disco duro externo de 1TB única y exclusivamente para guardar millones y millones de canciones. Porque el saber no ocupa lugar, pero la música es otro cantar. ¡De esta forma podemos viajar y escuchar muchos de nuestros viejos discos en cualquier lugar!
Bien, pues como no podía ser menos le he hecho una funda al citado aparatejo y para diferenciarlo del otro disco que tenemos esta vez escogí una tela de relojes de la colección de Tim Holtz, al más puro estilo Time de Pink Floyd, uno de mis grupos preferidos.
¿A que mola cantidubidubidoooo?
¡Feliz semana!
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