¿Cómo conseguimos que nuestras hijas no nos roben las cestas?
Pues regalándoselas directamente.
Este ha sido el caso.
Si no quieres que tu hija te robe tus cestas, encárgame unas directamente para ella.
La madre encantada porque las suyas, de momento, siguen en su sitio.
Si te quieres dar una vuelta para ver todas las publicadas, pincha aquí.
Pero si prefieres hacerlas tú misma, te ofrezco el tutorial.
Quiero agradecer a Teresa de Las historias de Terete, que se haya acordado de mi para darme este premio:
que comparto con gusto con todos vosotros.
Y sigo coso que te coso...