Lo del vacío enseguida se me pasa jajajaja. Antes de terminar un proyecto ya tengo otros en mente para hacer a continuación. Y cuando no, me tomo un periodo de descanso mental, que también viene bien. Y me encanta poder disfrutar de mis cosas terminadas, en este caso mi maravillosa colcha, que es la mejor colcha para siestas de sofá del mundo.
En el blog de De Estraperlo tenéis toda la información para poder hacer una igual. Además he disfrutado muchísimo compartiendo mis avances en el grupo de Facebook (en el que aun sigo) y tejiendo con tantas compañeras 2.0.
Así apilados los cuadros no parecen gran cosa ¿verdad? Pues hay 60.
Los separé por tipo antes de empezar a unir, para que me resultara más fácil el proceso (y porque me encantaba toquetearlos).
Las uniones en vertical se hacen un poco más pesadas, porque hay que ir buscando el cuadro que toca, sujetando los cuadros para poder unirlos bien... Es un proceso lento. Pero es un gusto cuando ves que la colcha va tomando forma poco a poco.
Las uniones horizontales se hacen más rápido ya que tenemos los cuadros unidos y solo hay que cerrar.
Y hacer la puntilla al final es una gozada, porque te puedes ir arropando con la colcha mientras tejes.
Aquí la podéis ver totalmente terminada.
Hubo quien no pudo resistirse a usarla. Con la guerra que me ha dado con los ovillos jajaja.
Aunque ya en primavera no estoy usando casi la colcha, la terminé hace varias semanas y la he disfrutado mucho todo este tiempo. Ahora está más como elemento decorativo, pero cuando vuelva el otoño empezaremos a darle uso otra vez.
¿Os animáis a hacer una igual? Seguro que al ver lo bonita que queda terminada, no os podéis resistir a empezar la vuestra. Me lo podéis contar en Facebook, Twitter, Instagram y Pinterest. Y por supuesto, aquí en el blog. ¡Respondo siempre!
Nos leemos :)
Fuente: este post proviene de El Taller de Naidú, donde puedes consultar el contenido original.
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