El segundo bloque se llama Bubble Wrap porque recuerda al plástico de burbujas. Se hace en punto avellana (o punto garbanzo) y es dificilillo de hacer, hay que tener experiencia previa con el ganchillo antes de atreverse con él. A mi me tocó deshacer un par de veces hasta que conseguí ajustar bien las tensiones.
Aquí veis el primero de ellos en proceso de bloqueo. Ya os conté que el bloqueo sirve para ajustar la forma y el tamaño de los cuadrados, para que queden todos iguales y sea más fácil unir. No es imprescindible, pero en este proyecto que los cuadros son tan diferentes unos de otros, he preferido bloquearlos todos. Algunas avellanas quedaron un poco irregulares pero en los siguientes cuadros fueron saliendo mejor.
Y en la siguiente foto, mis seis Bubble Wrap terminados y bloqueados, esperando para ser unidos a sus compañeros.
En resumen, un punto ameno que queda muy bien cuando por fin le coges el truco, pero para el que hay que tener el ojo de ganchillera entrenado. Si estáis empezando desde cero y queréis hacer este proyecto, os recomiendo que lo dejéis para el final.
Os cuento más cosas como siempre en Facebook, Twitter, Instagram y Pinterest.
Fuente: este post proviene de El Taller de Naidú, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado: