Como prueba de mi superobjetividad bloguera y porque en la vida beauty no todo es color de rosa, hoy vengo a hablaros de un producto que me ha decepcionado un poco, por lo que no puedo recomendarlo… Para que no parezca que siempre estoy fomentando el consumismo cosmético!!! Esto en honor a Bea, que dice que a este paso se deja toda la extra en comprar las cositas que se le antojan al leerme!!! De qué se trata?
Es la Intensive Skin Serum Foundation de Bobbi Brown, uno de los últimos lanzamientos de la firma. No pensaba cogerla porque he probado alguna que otra base con dosificador en gotero y nunca han terminado de convencerme, pero las chicas de Bobbi me disuadieron de llevarme la Stick Foundation de repuesto a por la que iba con la que yo era una mujer muy feliz y autorrealizada para probar la que me ha llevado a escribir este post. ERROR.
He de decir que debí pillar a las chicas de Bobbi en un día tontorrón o algo por el estilo, porque normalmente me recomiendan fenomenal y esta vez no dieron una: el tono que aseguraron me iba a las mil maravillas es como mi versión albina después de un invierno en el Polo Norte y la base no me ha parecido ni mucho menos mejor que la que yo iba a llevarme. Para nada. Ni por asomo. Nanai de la China. Vamos, que no.
Empiezo explicándoos de qué se trata… Como os digo es una base de maquillaje con gotero, pero primer fallo: la dosis perfecta es una dosis y media. Sí. Muy raro. Qué clase de burla es ésta? Dosis y media? No debería estar calculado para que la dosis que sale de una vez fuese la idónea para todo el rostro? Pues o yo tengo la cara más grande que la media internacional o algo falla…
Esta base es serum y base a la vez, y además tiene un SPF 40 que está genial. Pero dónde viene el problema? En que me gusta más su faceta de serum que la de maquillaje, y eso, tratándose de un producto que no deja de ser una base de maquillaje, pues hace que nos planteemos que algo falla. Esta base deja la piel muy bonita una vez que te la limpias y desmaquillas a conciencia por la noche, peeero no es muy cubriente y deja la piel con más brillos de los deseados. No tiene mucha duración, necesita retoques durante el día y el efecto buena cara es mucho menor que el de su hermanita en stick.
Por supuesto, sobra decir que aunque me dijeron que esta nueva base era muchísimo mejor que la que iba a llevarme, que me encantaría y que saldría a festejarlo durante cuatro días y cuatro noches, puesssss… no ha sido así para mí, después de probar ambas volvería a comprar la que viene en stick sin lugar a dudas.
Como conclusión: sed reflexivas y antes de gastaros 56 euracos en una base de maquillaje… Pedid un potito para probarla en calma en casa que las apariencias engañan pero los números en la economía casera no y si no da para un Ferrari es que no da. Qué le vamos a hacer? Esta entrada del blog me ha salido cara, pero yo vivo entregada!!!
Y vosotras? Habéis probado esta base? Os ha causado la misma impresión que a mí?
Que tengáis un día sin decepciones!!!
Maybe a dream
Fuente: este post proviene de Maybeadream, donde puedes consultar el contenido original.
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