El balance fue muy positivo. Encontré muchísimos stands de scrapbooking y bisutería, que son los que más me interesaba visitar, aunque también se pudieron ver otros dedicados al patchwork, trícot, máquinas de coser, cocina creativa, goma eva...
Aproveché para comprar unos sellos de la marca Aladine que estaban de oferta, dos washi tapes, cordones de antelina, abalorios y un kit del arte floral japonés kirei.
Compré este kit después de participar en uno de los muchos talleres organizados durante la feria. En el siguiente post os hablaré más en profundidad del taller kirei donde aprendí a hacer una rosa que parece de verdad.
Hubo cursos de scrapbook, costura, pintura sobre tela, bisutería con lana, decoración de cupcakes y galletas... También hubo exposiciones de distintas manualidades y se realizaron varios sorteos, aunque no tuve la suerte de que me tocara nada.¡ Otra vez será!
En cuanto a la organización hubo detalles a mejorar, como el hecho de no poder pagar con tarjeta en alguno de los puestos y los cursos. Así que la próxima vez llevaré dinero en efectivo puesto que tampoco había ningún cajero en el recinto ferial y tuve que darme un buen paseito para encontrar uno.
Lo que sí os recomiendo para futuras ediciones es comprar la entrada anticipada en internet porque estuve unos 45 minutos haciendo cola para entrar y podría haber aprovechado mejor ese tiempo.
En conclusión, os animo a que os paséis a visitarlo si tenéis la oportunidad.