Mi DIY de hoy,
viene porque desde que empecé con el blog,
he hecho varios trabajos con frascos,
como este
o este
¿y las tapas?, no las iba a tirar, ¿no?
Las guardé por "si aca", y llegó mi inspiración.
Ellas.
Sujeté la tapa con dos sargentos.
Taladro en mano, y
primero con una broca para metal nº 3, y después con una nº 5,
hice dos agujeros, más o menos simétricos.
Limé uno poco la rebaba.
Tres capas de gesso.
La primera.
Hubo una segunda, y a la tercera quedaron así.
La decoración.
¿Os he comentado alguna vez que me encantan los ángeles?
Seguro que sí :)
Pues por casualidad, navegando por la red,
dí con esta hoja.
La imprimí tal cual, y recorté algunos.
Pinté con gel medium la tapa, y puse el papel encima.
Por encima del papel otra capa de gel medium.
Con las otras tres hice una mezcla de las mías.
Pasé el pincel, sólo la punta, por el tapón de la botella de betún de judea,
y luego lo humedecí con barniz, y el efecto queda así.
Una vez secas, hice lo mismo que con las anteriores, les enganché el papel.
Aquí todas listas, dándoles una capa de barniz.
Esperando a que se sequen...
Listas todas, a decorar con tapas.
La que menos me inspiraba, le puse una ramita a modo de atril.
O...que os parece para hacer un regalo,
y ponerle una etiqueta diferente.
Y las tres restantes, las uní con un cordel de algodón.
Y ahora solo falta encontrar un buen sitio para lucirlas.
Con esta idea para reciclar tapas,
un viernes más participo en el Finde Frugal de Marcela.
¿Me acompañas?
¡¡¡Feliz fin de semana!!!