Las faldas largas son prendas especiales, con telas que las luzcan son ese lujo al andar que merece la pena.
No son faldas que se hagan en un ratito, pero luego llevarlas es todo un placer.
Ésta tiene como base un patrón de Burda, pero modificado en largura (unos 10cm del modelo original). Con piezas cortadas al bies y forro ligero de punto interior, buscando siempre que sea cómoda, eso sin duda es muy importante, ya que la experiencia te indica que después se convierte en prendas que usas más a gusto y eso merece el esfuerzo.En Instagram estos días, mientras iba cosiéndola os he compartido algunos consejos:
Aguja y prensatelas que ayudan a trabajar este tipo de tejidos de gasa
Otro consejo que quizá te pueda interesar, es que para que el bajo tenga un poco más de peso y consistencia, le puedes poner planchando antes de sobrehilar el bajo, cinta de fiselina o ligueta, la que es recta y sin pespunte en el centro. Además gracias al sobrehilado quedará más asegurada la cinta de fiselina y así el bajo es otra cosa, y al llevar la falda queda mas bonita.
Os lo recomiendo mucho, ya que desde que probé a poner esta cinta no he podido dejar de utilizarla, cambia mucho el cuento.
Así te quedará el bajo final
Y finalmente con el bajo alargado las piezas unos 10cm ha quedado así, una falda ligeramente ajustada en la parte de cadera, pero de verdad muy ficómoda y la parte baja con un vuelo bonito que hay que disfrutar...
Y a ti, ¿a qué prenda le dices sí con los ojos cerrados?
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Fuente: este post proviene de Moda en la Costura DIY, donde puedes consultar el contenido original.
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