No son difíciles de hacer y cuando os pregunten donde los habéis conseguido podréis decir con orgullo que los habéis hecho vosotras mismas.
Se empieza con un papel cuadrado de 21 cm de lado. Se divide en tres partes de 7 cm cada una, tanto en vertical como en horizontal y se dobla hacia adentro para que el papel se quede marcado. Se marcan las diagonales de los extremos y se doblan hacia afuera.
Doblamos por las diagonales y colocamos un lado encima del otro.
Doblamos en el otro lado de la misma manera y ya tenemos la forma de un cubo.
Hacemos un pliegue en el centro de los laterales para que al unir la parte superior quede la forma del bolso.
Con una cartulina hacemos la parte superior del bolso. Es un cuadrado de 7 cm de lado. A 3 cm hacemos un doblez y dejando un centímetro de ancho volvemos a doblar. Para el asa cortamos una tira de 1 cm de ancho por 14 cm de largo.
Pegamos el asa.
En uno de los lados de la cartulina cosemos un botón y en el otro hacemos un par de agujeros por los que pasamos un cordón.
Pegamos la parte superior e inferior del bolso por la parte de atrás y pasando el cordón hacia delante hacemos una lazada sobre el botón, para que el bolso se quede cerrado. No hay que dejar el cordón muy tenso, para que podamos abrir el bolso sin necesidad de deshacer la lazada, sólo sacando el cordón por encima del botón.
Los he preparado para una amiga que está organizando un bautizo y estoy segura de que le van a encantar, pero también serían un detalle muy bonito para cualquier otro tipo de celebración como comuniones, cumpleaños, baby shower, fiesta de 15 años…
¿Para que los usaríais vosotras?