- El instinto puede llegar a crear hábitos muy cómodos. Y en la pintura no es menos, y es que si te acostumbras a colocar en la paleta los colores en el mismo orden cada vez que pintes, con el tiempo cogerás una fluidez muy útil a la hora de realizar tus obras. De esta forma, no sólo te servirá para ir más rápido en tus pinturas, sino que también hará que el instinto de usar la misma gama de colores para ciertas pinturas, te ayude a coordinar los colores de una forma más natural y sencilla.
- Intenta dar una mayor proporción de óleo a las capas superiores. De esta forma, las capas más superficiales no se secarán antes que las inferiores y la pintura no se cuarteará tan fácilmente. Por eso, son ideales para el fondo y las capas inferiores los pigmentos que contienen plomo, cobalto y manganesio, que aceleran el secado. De cualquier manera, también es muy aconsejable dejar secar algunas capas antes de seguir con las más superficiales. De esta forma tardarás más pero, como todos los amantes a las manualidades saben, la paciencia es uno de los materiales e ingredientes principales en todo trabajo manual. Por eso, es mejor tardar un poco más en estas cosas ya que el resultado será mucho más satisfactorio.
- Para corregir ciertos defectos de la pintura o para limpiar una capa, tanto de óleo, como de barniz especializado para óleo, es una muy buena idea utilizar alcohol. Sin embargo, es mejor que para ello hayas hecho caso del consejo número dos y que, en la medida de lo posible, la capa que quieras borrar haya sido secada la última y sola, ya que si ha sido pintada con la capa anterior aún húmeda, borrarás las dos capas que se secaron a la vez.
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