Esto fue lo que dijo Rafa cuando vio el resultado del trabajo que habíamos hecho con una caja de naranjas que trajo el mismo a casa un día.
“Te traigo esta caja porque me ha gustado, la madera esta bien, ¿verdad?”, me dijo y yo mientras, dando saltos de alegría porque la caja era fantástica.
Pero era una caja sin vida, sosa y no decía nada, así que no nos quedó más remedio que ponernos manos a la obra y redecorarla.
Con dos manos de pintura y algo de imaginación mirad que cosa tan graciosa nos quedó.
¿COMENZAMOS?
MATERIALES QUE NECESITAMOS
1. Cajas de fruta
2. Pintura acrílica negra
3. Pintura de pizarra
4. Goma eva
1-
La caja de frutas ya era negra por fuera pero quisimos darle una mano de pintura para higienizarla un poco, así que le dimos una mano de pintura acrílica negra y dejamos secar.
2-
Después le dimos dos manos de pintura de pizarra porque queríamos que se pudiera escribir lo que iba a contener.
3-
Y ahora comenzamos con el interior de la caja, elegimos un color que contrastará mucho con el negro, y como no podía ser de otra manera elegimos un rosa muy vivo. Y comenzamos a pintar el interior de la caja, un par de manos y listo.
4-
Después cortamos una placa de foam o goma eva del mismo tamaño que la base de la caja y con la pistola de silicona lo pegamos en el interior de la caja.
Y ya tenemos nuestra nueva caja contenedora de las servilletas que tanto nos gustan.
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