El jabón de glicerina es un elemento necesario en cualquier baño. Sus formas, colores y fragancias son imprescindibles para dar un toque atractivo a nuestros aseos. Pero no solo es el mejor componente decorativo , sino que tiene los siguientes beneficios: suaviza la piel, es un producto anti-envejecimiento, acelera la sanación de heridas y ayuda a tratar enfermedades cutáneas.
¿Te animas a hacerlo con tus propias manos? Sigue los siguientes pasos:
- Para comenzar debes comprar una base de glicerina en una perfumería o droguería, cortarla en diferentes trozos e introducirlos en un recipiente con agua y ponerlo a hervir. ¡Importante este frasco tiene que ser resistente al calor!
- Cuando el producto haya pasado a estado líquido ya podemos personificar nuestro jabón. Para ello podemos utilizar diferentes especias y colorantes en función de los olores que más nos gusten. Además, debes elegir las formas que quieres darle. Podéis ver algunos moldes en Manualizando_tutoriales este enlace.
- Después de mezclar todo debemos de remover hasta que se cree una pasta ¡Tened paciencia!. El siguiente paso es verterlo en los moldes y esperar entre 30 y 45 minutos. Tras este tiempo podrás sacar tus jabones personificados de los recipientes. Es importante dejar que se sequen durante dos o tres días y ya estarán listos para usarlos. Aquí podemos ver algunos de las originales siluetas de SABONISSIMA.
¿Has visto que rápido y fácil?. Da rienda suelta a tu imaginación y deja a todos con la boca abierta.
Es tu turno.