Y vamos con una nueva entrega del serial cuadernos de bolsillo.
En este caso sigo con las pautas de los anteriores, diseños sencillos, y sin grandes florituras, para poder usarlos día a día y llevarlo en el bolso.
En este caso ha tocado uno de plumas.
Este papel en cuanto lo ví, me dije con esto se puede hacer cosas muy interesantes. Y es que ese brillito dorado, que no se aprecia como debería en las fotos, pero os aseguro que está, le da un toque bien elegante y distinguido.
Su interior es en tonos vainilla y verdes, completan este cuaderno, que a mí, me gusta un montón.
Y nada mas, un saludo y hasta pronto.