Me encantan los adornos de navidad porque están llenos de brillos y destellos, yo debo de ser como una urraca, porque todo lo que haga brilli-brilli me deja hipnotizada. La pasada Navidad hice una corona de navidad para adornar la puerta de mi casa con un estilo muy clásico, si os interesa recordarla, la podéis ver haciendo click aquí. Así que este año estaba que me volvía loca por hacer algo lleno de escarcha centelleante.
Desde pequeña he sentido fascinación por la escarcha blanca que brilla multicolor según le da la luz, en tonos lilas-amarillentos-verdosos, así que esa tenía que ser la elegida para decorar mi nuevo proyecto, y qué mejor que usar otro símbolo navideño, como es la estrella o cristal de nieve, que con sus infinitas formas hexagonales ha sido también objeto de mi fascinación desde mi temprana edad. Pero eso no era suficiente para mí, quería un toque más original para mi nueva corona. Ya que últimamente he estado muy metida en averiguar formas de transferir imágenes a la goma eva de colores y para mis pruebas he usado dibujos de mariposas ¿qué mejor que unas mariposas azules para que se posen en mi corona de estrellas de nieve?
Así que preparé una ilustración de una mariposa azul que existe en realidad, se llama "Morpho Peleides". También saqué, a partir de esa ilustración, otro dibujo de mariposa de color azul más clarito, ésta ya más basada en mi fantasía que en una mariposa auténtica, para complementar a la otra. Luego las imprimí en mi impresora inkjet, o de chorro de tinta, y las transferí a goma eva color azul turquesa utilizando el método que me inventé para transferir imágenes sobre fondos de color oscuro. Aquí tenéis los detalles de cómo se hace.
DESCARGAR AQUÍ LA ILUSTRACIÓN DE CUATRO MARIPOSAS AZULES
Y con las mariposas ya preparadas, me puse a hacer ya la base de mi corona. Decidí hacerla pequeña para que quedara llamativa pero no exagerada. Compré un aro de porexpan en una tienda de manualidades, papel de seda azul turquesa, escarcha a juego y goma eva blanca, todo ello son materiales muy económicos, básicos, y lo que sobra queda para usar en más ideas. De hecho espero tener tiempo a hacer más ideas para esta Navidad con estos materiales base y mostraos cómo les saco partido.
Cuando estaba cubriendo el aro con el papel de seda y cola blanca descubrí que podía acelerar la técnica con tiras más largas colocadas a lo ancho, como comento en el video tutorial que grabé mientras hacía mi corona. También que mojar el pincel en agua cantes de meterlo en la cola blanca ayuda a tener luego una aplicación más fluida del papel. Después de secado le di dos capas de cola blanca mezclada con purpurina turquesa.
Corté en la goma eva blanca las estrellitas de nieve, a dos tamaños diferentes usando taladradoras con esa forma. Estos troqueles los encontré muy económicos en los bazares chinos. Luego probé cuál sería la mejor forma de pintar las estrellas con la escarcha y, desde luego, no es con pincel (la escarcha parece no querer quedarse encima de la goma eva y perece irse a los bordes), sino mojándolas en una capa de cola blanca y luego en una de escarcha, así quedan perfectas. Las mariposas azules no se libraron de más "brilli-brilli" y, con un toque de purpurina turquesa mezclada con cola blanca, decoré sus ya bonitas alas, formadas caprichosamente con el calor de mi plancha de pelo, con más destellos hipnotizantes.
Pegué las estrellas sobre la base de la corona, preparé una lazada con una cinta brillante (como no) y plateada que encontré por casa y lo adherí todo a la corona. El resultado me tiene muy contenta. Queda precioso, de veras. Y si queréis entender mejor todo lo que hice, siempre es mejor que veáis el video, que para eso también lo hice ¿no?. Aquí debajo lo tenéis, animaos a hacer vuestra versión de la corona.... ¿quizá toda completamente llena de mariposas azules? Sería un trabajo digno de hacerse... si os atrevéis, por favor, no dejéis de compartirlo!