Me encanta reciclar. Creo que ya lo he dicho otras veces, pero es que ver objetos bonitos en las cosas que a otros les parecen basura, me parece mágico.
Buscar, unir, pulir, pintar, dar forma... y al final, tener algo único en tus manos que te refleja, que da imagen de quién eres, es algo increíble.
Hoy vamos a hacer este precioso corazón decorativo. Es una vidriera hecha con retales procendentes de los deshechos de una cristalería. Montones de pequeños trozos de cristal que iban a ser basura y que destellan en la ventana como algo exclusivo, hecho a mano y que nadie imaginaria que un día eran solo desperdicios.
Con un poco de imaginación,y sin mucha destreza, puedes cortar los cristales, unirlos y darle la forma que tú quieras. Este corazón es solo un ejemplo. ¿Qué te apetecería hacer a ti? ¿Una mariposa, una letra, un paisaje?
Los limites los pones tú,
En el video que encontrarás al final del post te muestro cómo he hecho esta bonita pieza. Vas a ver que es muy fácil, y que tiene muchas posibilidades. No sé, pero creo que haré más cosas con este material. ¿Te apuntas?
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