Para empezar he despegado con cuidado el papel que llevaba la huevera. No lo tiréis, porque sirve de patrón más adelante.
Cómo no me gustaba el color verde de la huevera la he pintado de rosa por fuera y de blanco por dentro, utilizando pintura acrílica. La huevera amarilla la he dejado en su color natural.
Utilizando de molde el papel que le hemos despegado antes, cortamos uno igual en un papel estampado que nos guste y lo pegamos sobre la huevera.
También podemos pegar un trocito de papel en el interior de la huevera.
Colocamos los calcetines enrollados en los huecos y este es el resultado: un paquete requetelindo.
También he probado a decorar la huevera amarilla. En este caso he utilizado tela en lugar de papel, pero queda igual de bonita…
¿Qué os parece? ¿Habéis utilizado alguna vez una huevera como envoltorio?
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