He empleado tanto punto simple con dos agujas, como puntos altos a ganchillo. Lo bueno de este tipo de gorro, es que sirve cualquier medida de lana y de agujas, ya que nos guiaremos por las medidas: solamente hay que tejer un rectángulo de 15×30 centímetros (para recién nacido), y después hacer una costura que irá en la parte trasera de la cabeza.
Si pensáis que el bebé será grandote se le puede hacer un poco más grande, por ejemplo de 16×32 o de 17×34.
La primera la tejí a dos agujas: monté 30cm de puntos y después solo tuve que tejer 15 cm más. Se une por el lado que se finaliza la labor, y el resultado es un cuadrado. Para terminar, se cose un trozo de cinta al biés (cerrada, para que funcione de cinta) a cada lado, o cinta de raso, para anudar bajo el mentón.
A ganchillo lo estoy haciendo igual, empecé tejiendo 15cm y después creciendo los 15 restantes.Para rematar, les haré un adornito por el filo con forma abanicos.
Si os gusta más liso, yo recomiendo rodear toda la labor con una vuelta de punto enano para que los bordes queden perfectamente uniformes. De igual modo que antes, coseré la cinta elegida a los lados, para poder anudar el gorrito.
Actualizaré la entrada cuando los termine, para incluir las fotos de cómo quedan a ganchillo, de momento, os dejo con el de punto.
Lo bueno es que al guiarse por las medidas se puede utilizar cualquier tipo de punto que nos apetezca. Yo he elegido
estos ya que tenemos el invierno cerca y quedan bastante tupidos.
Esto es todo, junto con cualquier otro trabajillo queda un detalle muy coqueto para cualquier bebé, ¿no os parece?