Estos días estoy terminando una canastilla de bebé, y estoy haciendo la toalla. Es un detalle que incluyo en cada canastilla porque todas las madres dicen que les resulta de lo más útil, y que no suelen preverse cuántas se necesitan.
MATERIALES:
-Tela de rizo del color deseado
-Cinta al biés de raso u algodón, como más os guste
-Un triángulo para formar la capucha de una tela que os guste, figurillas de fieltro, o si os atrevéis hilo de algodón para hacer un bordado
-Hilo, tijeras, alfileres, jaboncillo, máquina de coser, etc.
PROCEDIMIENTO:
Se corta un cuadrado de tela de rizo de 80×80, que es la medida típica de recién nacido. Como mis amigas suelen tener niños largos, yo se la hago de 90×90 para que les dure un poco más en uso.
Después se corta un triángulo de tela de rizo y de la tela bonita, que tenga 30 cm a cada lado, y se sujeta con alfileres. En el caso de que en lugar de tela, optéis por algún adornito, o bordar el nombre.
El siguiente paso es opcional. Yo no lo he probado hasta la última toalla que he confeccionado y el resultado me ha gustado mucho más. Se trata de redondear las esquinas. Queda mucho más bonito, pues no se ven los pliegues de la cinta al biés si dejamos las esquinas angulosas.
Podéis comparar en las siguientes fotos, y ver qué resultado os gusta más.
El siguiente paso es hilvanar la cintal al biés. Este paso es esencial para las menos expertas, las buenas costureras seguro que lo hacéis del tirón. Yo siempre hilvano en un color vistoso, para que sea más fácil después quitar el hilo correcto y no meter la pata. Es importante que lo primero que hilvanéis sea la capucha, la parte que va sobre la frente, para que al hacer el contorno de la capa, las esquinas queden tapadas.
Y poco más, ya solo os quedaría, lavar, plachar, envolver en papel de seda, y elegir un envoltorio bonito. Si os animáis a hacer una seguro que tendréis a una mamá contentísima con un detalle tan útil y necesario en el día a día del bebé.