Para una madrileña como yo, es un placer que te encarguen una canastilla para Magerit, más Madrid imposible.
Me la pidieron en tonos alegres, no sé si lo habré conseguido, pero llamativa si es.
Empezamos por la cesta, en arpillera color crudo y con piqué de nubes en tonos verdes.
La mochila, con animales de granja, como la de Olivia
Detalle del bordado:
El dudú, también colorido.
Suavizamos un poco con la toalla eructitos
Vamos con el sujeta o convierte baberos.
Con el perrito cojín de semillas, que tiene una sonrisa muy tierna.
Y por último una bolsita para que guarde sus zapatitos.
Ya tengo en marcha otra canastilla, otra vez niña, parece que seguimos dominando.
Y sigo coso que te coso...