Hoy traigo un trabajo de reciclaje, convertir una vieja caja de vino en una camita para mi gata Fiona.
Con esta caja de vino que me encontré, le quite la tapa y le corte el frente par que pueda entrar comodaménte.
Le he añadido unas patas que tenia por casa de un viejo mueble.
La he pintado con pintura a la tiza en color gris y luego la he envejecido un poco a pincel seco con blanco.
Con retales de lana, le he confeccionado el cojín en tonos gris, malva y blanco.
Y para que no le falte detalle, con vinilo negro adhesivo he recortado su nombre y unas huellas para quedara totalmente personalizada.
Y el resultado parece que le ha gustado, aquí probandola y parece que esta agustito, no? ja,ja,ja..
Hasta la proxima.
Un beso!