Necesitaba un camino de mesa para jubilar el que tenía, ya que después de mil batallas no estaba muy bien parado. Es de ganchillo y me lo hizo mi madre hace muchos años, por lo que a pesar de estar ya roto lo guardaré en un cajon como recuerdo.
Mavi nos propuso en el grupo este tan original. Fue un amor a primera vista, me pareció precioso. Saqué un ratito y en unos días lo tenía terminado.
El acolchado ha sido a mano y de lo más sencillo, en las lineas rectas y alrededor de las flores
Mavi lo ha hecho en tonos rojos, Rosa en telas negras y el mio en azules. A que son todos preciosos.