Esta vez, era un proyecto para una destinataria que queremos mucho en Alichemade, por eso teníamos muy claro como la necesitaba y como se la queríamos hacer nosotros. Tenía que ser redonda, porque en más de una ocasión nos había comentado que era así como le gustaría ponerla en la entrada de su casa. Después de mucho probar, hacer, deshacer y volver a empezar, el patrón que más se adaptó a sus necesidades era el que se basaba en un posavasos de ganchillo, si, si, lo que oís, el patrón del que partimos era el de un posavasos; se nos ocurrió que si nos gustaba el patrón en pequeño también podía quedar genial en el tamaño XXL. Eso si, tenemos que reconocer que tuvimos que hacer muchas adaptaciones, número de puntos, tipo de puntos, número de vueltas,?, porque sino no había manera de que quedara planita. Como queríamos que fuera ligerita, también omitimos algunas vueltas que se suelen poner al principio, que son muy tupidas y hacen que una alfombra sea muy pesada, porque recordar que uno de los problemillas del trapillo, es que los trabajos al final resultan muy pesados; para una alfombra que hay que limpiar cada poco tiempo, porque está en un punto de tránsito, esto nos pareció que era muy importante; por eso es muy caladita para que sea fácil de manipular, tanto al expulsarla como al lavarla o al tener que manejarla mojada?
¡Esperamos que os guste el resultado tanto como a ella!.
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