En esta ocasión he utilizado una caja de madera que es un botelleto, pero ha quedado como un maletín un tanto particular, porque le he quitado la madera divisoria que tenía dentro. Como veis la caja tiene unas delimitaciones de las superficies y las he usado para combinar los colores... que en este caso han sido blanco y negro.
Lo primero que he hecho ha sido pintar toda la caja, tanto por dentro como por fuera, con pintura acrílica blanca para proteger la madera. A continuación he cubierto unas partes con servilletas de papel y otras las he pintado con pintura acrílica negra, para contrastar unas zonas con otras... y este ha sido el resultado!
El acabado final lo he hecho dándole dos manos de barniz acrílico con brillo, para proteger la caja y darle un poco, muy poco, de brillo y que se vea bien acabada.
Qué os parece el resultado? a mi me ha encantado como ha quedado, ademas de habérmelo pasado genial planeando como hacerla y después haciéndola. Así que imagino que no me quedare aquí y seguiré decorando mas cajas de madera con esta técnica que acabo de descubrir.
Espero que os haya gustado la entrada de hoy y que tengáis un día estupendo.
Chao!!