El origen de este vestido se remonta más de 100 años atrás cuando se confeccionaba en Estados Unidos a partir de una funda de almohada vieja y también a partir de sacos de patatas o carbón, tal era la escasez del momento.
Si te fijas el vestido no es más que una pieza rectangular con un dobladillo abajo y otro arriba del que que han recortado unas piezas para hacer la forma del brazo. Exactamente como una funda de almohada.
Por suerte ahora podemos hacer estos vestidos con telas bonitas y decorarlos con los lazos que más nos gusten.
Para calcular la talla que necesites has de tomar dos medidas:
el contorno del cuerpo por su parte más ancha (en un bebé será la barriguita, en una mujer probablemente el pecho o la cadera). Multiplica la medida que obtengas por 1,5 y tendrás el ancho.
el largo, tomado desde un poco más arriba de la axila hasta por encima de la rodilla. Puedes adaptarlo a la medida que quieras, también quedan bonitos bien largos.
Solo necesitarás:
Tela bonita
Lazo a juego
Tijeras y alfileres
Puedes jugar a combinar con lazos de distinto color y darle un aire diferente al vestido según el día.
En este tutorial puedes ver cómo hice este pillowcase dress para mi peque que está deseando estrenarlo.
En esta lista de reproducción hay muchas más ideas para niños y bebés, solo has de pinchar AQUI.
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