Como ya os he contado este verano hemos estado entretenidos, aprendiendo ganchillo, en el taller improvisado.
Un día una de las niñas, me trajo una diadema que tenía algo ya viejecita, para que le diera un toque diferente.
Así que en un periquete me puse a ello, y le tunee la diadema, ella ha quedado encantada,
En muy fácil de realizar, forramos la diadema a punto de cadeneta pasándola por la misma diadema, de vez en cuando le ponemos algún abalorio, que previamente habremos insertado en la lana antes de comenzar a forrar la diadema.
La terminamos, anudamos bien para que no se salga y listo... Diadema nueva.