Con este chal pasó que lo empecé para regalarselo a mi suegra por su cumpleaños, y luego decidí que podría quedarle mejor un chaqueta, así que lo aparqué y me puse a ello. La chaqueta quedó espectacular, pero eso ya lo vereis en otro momento :)
El patrón es casi totalmente improvisado. Me puse a jugar con la idea de un chal triangular clásico, con pequeños diamantes en el cuerpo y un calado ancho con abalorios para rematar.
Utilicé un hilo de seda y cabra de Don hilado por mi amiga Tatiana, de La Rueca Rusa. El resultado final es un chal clásico, muy ligero y ponible. Este diseño tiene muchas posibilidades, y seguramente repita.
La idea de los abalorios se me ocurrió a última hora, y he de decir que el resultado me encanta. He usado abalorios de cristal tornasolados. Son elegantes a la par que discretos, y dan mucho juego :)