Albert ha utilizado Dylusions en spray. Yo tengo Dylusions en tarro así que para simular un aspecto más líquido, como el de los sprays, he rociado previamente las cartulinas acuarelables con agua y después he aplicado las pinturas ayudándome del borde de un acetato.
También había que ayudarse de utensilios de cocina para realizar efectos, así que yo he usado una espumadera para que la pintura pasase a través de los huecos para escurrir. Para crear contraste sin emborronar he usado sólo Dylusions blanca. Al ser pintura al agua se pueden lavar perfectamente los utensilios y no quedará rastro de la pintura. Mi espumadera es metálica y después ha bastado con ponerla bajo el agua del grifo y la pintura ha desaparecido.
En otra de las cartulinas he usado unos ralladores para dejar pasar la pintura a través de sus huecos. Los efectos que se pueden conseguir son muy chulos. Me hubiera gustado utilizar también una malla de las de naranjas para aprovechar su rejilla, pero no tenía ninguna...
Después de dejar secar bien las cartulinas he cortado la figura del tag y la de la tarjeta base y me he dedicado a estampar y recortar bastantes sellos con imágenes y textos para combinar. Me han sobrado, pero quedan tan bien que los guardaré para futuros trabajos.
Para terminar he tintado cinta de raso blanca con un par de tonos de Dylusions y junto con un poco de Bakers Twine la he atado al conjunto.
Mis manos han terminado sobre todo azules, rosas y rojas que son los colores más fuertes del tag, pero es realmente divertido trabajar con este tipo de pinturas.
Fuente: este post proviene de Terraza Malva, donde puedes consultar el contenido original.
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