Hoy voy a seguir con los regalos que hice para regalar a Cayetana. Ya os enseñé un conjunto para verano aquí y otro conjunto para invierno aquí. En esta ocasión os traigo algo para usar en casa. Se trata de un conjunto de funda nórdica, cosida y decorada por mí, con uno de los diseños que suelo usar en las camisetas. Esta vez le ha tocado el turno al modelo "En Abril, aguas mil…". Y es que esta nubecilla encantadora me tiene enamorada y en cualquier sitio donde la ponga luce igual de bien.
Al igual que en el conjunto decorado con el osito, aquí me decanté también por emplear tonos camel y beige. Y es que yo no soy muy fan de aquello del "rosa para niña y celeste para niño". Por eso opté por hacer algo en tonos más neutros. Y como además se que los papis de la criatura son bastante clásicos, no era cuestión de emplear colores y estampados más chillones.
Para la funda he combinado la misma tela camel con lunaritos blancos que usé en la camiseta que os enseñé en la anterior entrada junto con un lienzo beige de un tacto muy agradable. Y para la nube he usado una tela con estampado de lunas y estrellas en los mismos tonos que la tela de lunares.
Aquí os dejo algunas imágenes de cómo ha quedado el conjunto:
Como habéis podido ver, la funda ha ido acompañada por un cojín con forma de nube que tiene dos caras distintas, de forma que puede ser usada tanto por un lado como por el otro.
Aquí podemos ver la nubecilla por su cara despierta, que nos mira un poco picaruela:
Y por el otro lado podemos verla completamente dormida, así que shhhhhh, no vayamos a despertarla…
¿Os ha gustado? No era la primera funda nórdica que hacía. Hace ya varios años hice una funda para regalar a mi sobrina Nora, que podéis recordar aquí. Así que 3 años después, he decidido atreverme con otra con un diseño distinto. En aquella ocasión os comentaba que mi destreza con la máquina de coserera bastante mejorable. En esta ocasión ya me defiendo un poco mejor con ella, así que me he atrevido a usar alguna que otra técnica que me permitiera terminar la funda con un acabado más fino y curioso. Y he probado por primera vez a hacer costuras francesas, que para quien no sepa de qué se trata, os cuento que es una forma de hacer que las costuras interiores queden ocultas y no se vean hilos molestos en el interior.
Aquí podéis ver cómo ha quedado por dentro la funda:
No era necesario hacer esta terminación, pero me hacía ilusión probar algo nuevo y aunque ha sido bastante más trabajo que si se tratase de una costura normal, creo que ha merecido la pena el hacer una pieza mucho mejor acabada.
¿Os ha gustado el conjunto? Espero que si, porque como siempre, he puesto a la hora de hacerlo todo el cariño del mundoy muchas horas de trabajo (perdí la cuenta de cuánto tardé en hacerla, mejor no pensar en eso… lo importante es el resultado final, ¿verdad?)
Besos y hasta la próxima entrada.
Fuente: este post proviene de Día Tras Día, donde puedes consultar el contenido original.
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