Todo empezó cuando vi a Puri haciendo este quilt, me enamoré de él y quise hacerlo.
Pensé en mi madre y le pregunté si a ella le gustaría un quilt para poner en la habitación de invitados. Me dijo que encantada que no había querido pedírmelo porque sabía que llevaba mucho trabajo.
Estos fueron los inicios, pero quedaba un mes para el día de la madre y ese quería yo que fuera mi regalo.
Pues a correr, se ha dicho. Que nos gusta trabajar bajo presión.
Puri, aprovecho para darte las gracias por las pautas que me diste, sin ellas no hubiese llevado el quilt tan rápidamente a buen puerto, además de la mañana que pasamos tan buena eligiendo las telas con mi madre.
Que complicado es sacarlo entero!!!
Mide 1,50 x 2,50 metros.
Aquí el detalle de un bloque. Está acolchado a mano por las costuras. Para que os hagáis una idea he gastado una bobina de 300 metros de hilo.
La verdad es que estos quilts son siempre más bonitos al natural.
Hoy se lo doy a mi madre, estoy segura que le va a encantar (las telas, no olvidéis que las ha elegido ella).
Mamá, quiero que lo disfrutes mucho, que te quiero un montón.
Y sigo coso que te coso...