Caminar mucho implica, entre otras muchas cosas, ver que a su vez te hace encontrar y llega un momento que ese encontrar te lleva irremediablemente a buscar. En este sentido creo que no somos conscientes de lo que los seres humanos tiramos o que simplemente abandonamos.
Hace tiempo que me propuse reciclar para volver a utilizar con arte lo abandonado. En éso está inspirado este producto que llena esta entrada de mi blog.
Un aislante de cristal del tendido eléctrico lo he convertido en un coqueto y original portavelas decorativo.
Como creo que os gustará mucho y yo necesito de vuestros comentarios, estaré encantado de leer y responder vuestros comentarios y apreciaciones.
Fuente: este post proviene de Lavitamusicgifts, inspiración sostenible , donde puedes consultar el contenido original.
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