Primero disfruto bordando el nombre, como siempre a punto de tallo.
Como solo tiene 4 letras las hago bien grandes, faltaría más!!!
Después, conformo la mochila, intentando que no se me olvide la etiqueta, los enganches para que pasen los cordones de la mochila, poner los pasacintas...
Os parecerá una bobada, pero cuando haces muchas, es más fácil que se te olvide algo.
En este caso, el forro es de cuadritos de vichy en marrón y blanco que tanto me gusta. Y me gusta porque le da cuerpo a la tela de algodón del exterior.
Si os animáis a hacerla, os dejo con el vídeo.
Y sigo coso que te coso...