Después de tapizar el sillón, me sobró un buen trozo de tela. Me gusta tanto que pensé en darle uso y aquí está. Seguro que os pasa a vosotr@s, que teneis muchas bolsa de tela del super horrendas. Son funcionales, sirven muy bien para su uso, pero son feas, ¡qué vamos a hacer!
Así que aproveché la tela para hacer una bolsa grande para la compra. La reforzé con dos telas de Ikea (que suelen ser tipo loneta), reforzé bien las costuras y le añadí en el fondo dos trozos de cartón duro en una funda para darle consistencia al fondo. Dudaba en ponerle un pequeño bolsillo interior, si ponerle tapa o cremallera o no, pero al final opté por lo práctico, que muchas veces nuestra compra sobresale (mi batalla es la barra de pan) y no la puedes cerrar.